Una pequeña mancha “tricolor” se pudo observar en el estadio Shafa de Bakú. Aproximadamente 35 personas integrantes de la colonia colombiana en la capital de Azerbaiyán y algunos familiares de las jugadoras de la Selección hicieron presencia en el juego ante Canadá y apoyaron al grupo desde el principio hasta el fin.
Por Lina Barreto Brochero
“Estando en un país tan lejano y teniendo la oportunidad de apoyar y sentirnos tan colombianos, es para nosotros un honor. Las niñas están mostrando todo su empeño y todo su esfuerzo, además somos una familia que adora el deporte, entonces donde esté Colombia nosotros vamos a apoyar”, manifestó Juan Sarmiento, un bumangués radicado en esta ciudad desde hace dos años junto a su esposa y sus dos hijos.
Viven la pasión del fútbol
Y no era para menos las “cafeteras” venían de ganar ante el local y buscaban su clasificación a la siguiente ronda. “En el jugo ante el local estuvimos presentes con toda la pasión del mundo, nos reunimos todos con la confianza total en el equipo colombiano y no nos defraudó”, señalo.
“Vamos Colombia que esta tarde, tenemos que ganar” y “sí se puede” eran las principales consignas de los aficionados que con banderas, pancartas y pitos hacían más visible su presencia en el escenario deportivo que cuenta con una capacidad de 7.500 personas.
Resultado adverso
A pesar que en los primeros minutos del segundo tiempo Canadá logró una anotación que les permitió quedares con los tres puntos, la barra continuó animada y respaldando a su equipo hasta el pitazo final.
Juan Sarmiento manifestó que el apoyo es incondicional hacia el equipo de su tierra, no importa si ganan o pierdan estarán acompañado a las deportistas nacionales hasta el final de su participación en la Copa Mundial de Fútbol Sub 17. “Hemos tenido la oportunidad de ver a las chicas, darles un abrazo y un saludo, es muy lindo, nos sentimos orgullosos de ser colombianos”, concluyó.